Aragón se compromete a terminar el plan de cribado de cáncer de colon antes del 2024, de tal modo que el 100% de la población de entre 50 y 69 años de la comunidad habrá recibido entonces la invitación para realizarse el test de prevención. El anuncio, que lo realizó este martes la consejera de Sanidad de la DGA, Sira Repollés, supone un importante paso al frente de Aragón en la lucha contra este tipo de tumor después de que el cribado se interrumpiera durante unos meses debido a la pandemia y se retomara el pasado 1 de diciembre. «Desde entonces 77.000 personas de entre 60 y 69 años ya han recibido la carta para someterse a la prueba a lo largo de este año. La previsión es ir aumentando poco a poco las zonas de salud, llamando a un total de 166.000 pacientes durante el 2022 y el 2023 para llegar a ese 100% en el 2024», explicó Repollés durante una visita a la sede de la Asociación Española Contra el Cáncer en Zaragoza.
De los 5.500 cánceres que se diagnostican anualmente en la comunidad, el 19% son de colon, cuyo Día Mundial se celebra este miércoles. En Aragón, este tumor es el de mayor incidencia (por delante de mama o próstata) con 1.201 casos diagnosticados en el 2020. Además, es el segundo tipo de cáncer que más muertes causa al año, con 553 personas fallecidas en el 2020 en la comunidad.
Pese a todo, «se trata de un tipo de cáncer que se puede prevenir», reiteró ayer el presidente autonómico de la AECC, Joaquín Larramendi, quien animó a la población a participar en el cribado porque «vamos a salvar muchas vidas», aseguró. «La prueba de sangre es heces es sencilla, fácil de hacer y muy barata para el sistema. Podemos evitar desarrollar el cáncer y si ya está desarrollado, al detectarlo en un estadio previo el tratamiento será más sencillo y eficaz», dijo.
El factor de riesgo más importante en esta tipología de tumor es la edad. Científicamente se ha demostrado que los programas de cribado de cualquier tipo de cáncer (también existe en mama o cérvis) son capaces de disminuir la mortalidad a corto plazo entre el 30% y el 35% lo que equivale, en España, a salvar unas 4.000 vidas. La tasa de supervivencia a 5 años para las personas con cáncer colorrectal es del 65 %. Sin embargo, esta varía con un diagnóstico precoz localizado pudiendo llegar al 90%.
El test que debe realizar el ciudadano, que es voluntario una vez que la DGA_le ha enviado, la carta, permite detectar si las deposiciones contienen pequeñas cantidades de sangre que no se ven a simple vista. Si el resultado es positivo, es probable que sea una lesión benigna (pólipos), pero en algún caso se puede deber a un cáncer. Ante esta posibilidad, el paciente debe realizarse una colonoscopia (exploración del interior del intestino) y en la misma se le extraen ya los pólipos cancerígenos.
Efectos de la pandemia
Las restricciones derivadas de la pandemia y la presión asistencial a la que ha estado sometido el sistema ha provocado cierto embudo en las colonoscopias. La intención de Sanidad, una vez que se ha retomado la actividad, es «acompasar» las invitaciones con la capacidad de realización de estas pruebas.
Por otro lado, no se disponen de datos de cuántos cánceres se han podido dejar de diagnosticar tras la suspensión, en la primera ola, de todos los planes de cribado, pero en la AECC Aragón hace meses que vienen advirtiendo de que sí ha habido un impacto directo. De hecho, en los hospitales se han visto diagnósticos tardíos y, por tanto, menos supervivencia.
Larramendi, que agradeció que este plan se pueda cumplir al 100% en unos años, insistió en que la participación es «fundamental. Cumplimentar el cribado de colon supondrá a Aragón tener una foto fija de los beneficios de estos programas, ya que se estima que con la participación de la población diana superior al 65% se cumple el objetivo.
Más allá de estos planes, evitar el consumo de tabaco, alcohol y la obesidad, así como realizar actividad física, ayudan en esa prevención. «Tener un estilo de vida saludable es sin duda muy importante», dijo Repollés. La consejera, por otro lado, también anunció durante su visita a la sede de la AECC en Zaragoza que en junio, cuando terminó el estado de alarma, se retomó también el cribado de cáncer de mana. «Se recuperó el ritmo habitual y en el 2020 se consiguió invitar al 80% de la población diana prevista, a pesar de la suspensión del entre marzo y junio», matizó la consejera.