La obesidad es el primer paso para otras patologías como hipertensión arterial, diabetes tipo 2, índices elevados de colesterol y triglicéridos, problemas osteoarticulares, riesgo de padecer cáncer, apnea del sueño y problemas cardiovasculares, entre otras muchas.
En España un 5,2% de las personas entre 25 y 64 años tienen un Índice de Masa Corporal (MC) superior a 35 y un 1,6% superior a 40. Estos pacientes son potenciales candidatos a la cirugía bariátrica, la intervención quirúrgica más adecuada para acabar con la obesidad.
Pero ¿en qué consiste la cirugía bariátrica o de la obesidad? Pues lo primero que aclaran los expertos es que no se trata de una cirugía estética, sino de una intervención destinada a prevenir o mejorar las complicaciones derivadas de la obesidad a través de la pérdida de peso.
Los procedimientos quirúrgicos son varios y van dirigidos bien a reducir la cantidad de comida que el paciente puede tomar, bien a que los alimentos no sean absorbidos por el organismo. La intervenciones más usuales son 3 según explican desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición:
La cirugía bariátrica es una de las intervenciones más rentables para el sistema sanitario, por varias razones. Por un lado, existen beneficios tangibles directos, como la reducción de la mortalidad y el aumento de la supervivencia (10 años más) o la reducción de las comorbilidades.
Por otro lado, esta mejora en la salud del paciente supone también importante ahorro en el consumo de medicamentos y de prestaciones sanitarias e, incluso, el final de la incapacidad laboral en muchas ocasiones.
Además, la doctora Raquel Sánchez Santos, añade que la cirugía también tiene beneficios indirectos muy visibles, como mayor reinserción en el mercado laboral, la reducción de bajas laborales o la disminución de muertes prematuras en población activa.
Y, por último y más importante, la cirugía bariátrica consigue mejorar de forma sustancial la calidad de vida de los pacientes, «desde poder atarse los zapatos a disfrutar de más actividades en familia y mayor interacción social» afirma la presidenta de la SECO.