El 39 por ciento de las muertes por accidentes de trabajo en jornada laboral se relaciona con enfermedades cardiovasculares, según se ha puesto de manifiesto durante el encuentro 'Promoción de los hábitos cardiosaludables en el entorno laboral', organizado por la Fundación Española del Corazón (FEC), con la colaboración del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST).
Por otro lado, el Marco Estratégico Europeo en Seguridad y Salud en el Trabajo asegura que las enfermedades de naturaleza cardiovascular son la segunda causa de muerte de origen laboral en Europa, representando casi el 25 por ciento de las defunciones.
Durante el encuentro se ha repasado el impacto que tiene la enfermedad cardiovascular en el entorno laboral, y el papel de los determinantes de la salud cardiovascular que afectan a la población trabajadora y al tejido económico, como son el envejecimiento, la morbilidad cardiovascular, los trabajos sedentarios, y factores estresores como el ritmo y la carga de trabajo.
Así, se sabe que de los casi 700.000 procesos gestionados por las unidades médicas del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) en 2019, el 12 por ciento fue por patología cardiovascular. Asimismo, estas enfermedades son las segundas, tras el cáncer, con una mayor duración media de incapacidad temporal (130 días). Las bajas superan de media los 90 días, en el grupo de 36 a 45 años, en todas las comunidades autónomas.
Igualmente, se ha subrayado la necesidad de optimizar las estrategias de prevención cardiovascular y de riesgos laborales desde distintos niveles: a nivel nacional, por parte de las administraciones públicas, interlocutores sociales, asociaciones profesionales y fundaciones; y a nivel empresarial, a través de los servicios de prevención de riesgos laborales. Todo ello con la prevención como eje central, tanto en lo que respecta a los factores de riesgo clásicos como a los factores psicosociales.
"Las empresas compartimos el cambio producido tras la irrupción de la pandemia de la COVID-19, en lo que a puesta en valor de la salud en sentido amplio se refiere, y las nuevas orientaciones en el tratamiento y metas de la seguridad y salud en el trabajo, procurando una mejora en el bienestar laboral y mental de las personas trabajadoras y una mayor sostenibilidad de las empresas", ha enfatizado la experta en prevención de riesgos laborales del departamento de Empleo, Diversidad y Protección Social de la Confederación de Organizaciones Empresariales (CEOE), Helena Morales de Labra.
Fuente: Heraldo de Aragón