La zaragozana Celia Latorre, de 66 años, se sometió en 2015 a un trasplante de córnea del ojo izquierdo con una novedosa técnica que se puso en marcha en el Hospital Miguel Servet. Al año siguiente volvió a pasar por el quirófano para ser intervenida del derecho.
"Estaba en la lista de espera y cuando me ofrecieron esta alternativa, que consistía en no trasplantar la córnea entera, no me lo pensé", recuerda. Fue una de las primeras trasplantadas con este procedimiento en Aragón. La recuperación fue muy rápida: "Al segundo día ya veía perfectamente". "Primero me operaron de cataratas y al mes hicieron la cirugía del trasplante", explica. Entonces, cuenta, ella ya estaba prejubilada: "Si hubiera estado trabajando no habría podido seguir en activo, porque la enfermedad me limitaba mucho". "Llevaba tres años sin conducir y desde el trasplante puedo hacer una vida normal", resume.
Cada seis meses acude a revisión y todas las mañanas se echa unas gotas en los ojos para evitar el rechazo. Hace poco más de un año, junto a otros afectados, como José María Anoro, decidieron poner en marcha la Asociación de Trasplantados de Córnea de Aragón (Atca), que cuenta con la implicación de más de 30 personas.