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9 junio, 2022Alicia Guerrero Molina, enfermera de la Unidad de Investigación Traslacional del IIS Aragón en el Hospital Universitario Miguel Servet
9 junio, 2022«Si logramos conocer mejor las causas y consecuencias de la prematuridad, llegará un día en que conseguiremos prevenirla«
Cristina Paules Tejero (Zaragoza, 1985) estudió Medicina en la capital aragonesa e hizo la residencia en el Hospital Clínico Lozano Blesa en la especialidad de obstetricia y ginecología. Tras realizar una subespecialización en medicina materno-fetal mediante un contrato Río Hortega en el Hospital Clínic de Barcelona, centro de referencia en su campo de trabajo, regresó a Zaragoza y actualmente disfruta de un contrato Juan Rodés en el Hospital Clínico Lozano Blesa. Realizó su tesis doctoral sobre ‘Biomarcadores en el parto pretérmino para la predicción del desarrollo neurológico a medio plazo’, codirigida por la Universidad de Zaragoza y la Universidad Johns Hopkins de Baltimore (Estados Unidos). Fue premio extraordinario de doctorado de la Universidad de Zaragoza y de la Real Academia de Medicina.
¿Cuándo supo que quería estudiar Medicina y la especialidad en la que quería trabajar?
Me viene de familia. Mi padre era médico y es una profesión que desde pequeña viví en casa. No recuerdo haber querido ser otra cosa que no fuera médico. En cuanto a la especialidad, al principio me atraía más la oncología, pero las primeras prácticas que hice en ginecología y medicina materno-fetal centraron totalmente mi atención. Durante la carrera me encantaba la asignatura de embriología. Me parece fascinante cómo se acaba formando una persona a partir de dos células minúsculas. En el seguimiento de un embarazo vas viendo cómo se desarrollan los órganos, cómo se va formando un ser humano… Por eso me especialicé en medicina fetal.
¿Y por qué se dedica a la investigación?
Siempre me había llamado la atención. Si algo me hizo dudar respecto a estudiar Medicina fueron algunas carreras de laboratorio más relacionadas con la investigación, como la biología celular o la bioquímica. Es verdad que en la universidad no nos hablaban de la investigación como opción profesional, pero cuando empecé la residencia conocí a Daniel Orós, adjunto de Obstetricia del Hospital Clínico e investigador principal del grupo Fisiopatología placentaria y programación fetal del IIS Aragón. Para mí, Daniel ha sido un referente por su carrera clínico-investigadora y es la persona por quien me inicié en la investigación. Posteriormente, me trasladé al Hospital Clinic de Barcelona, uno de los mejores centros en su campo a nivel mundial, para ampliar mi formación en la investigación en medicina materno-fetal.
Allí en Barcelona fue la investigadora principal del ensayo clínico IMPACT BCN. ¿En qué consistió?
Era un ensayo clínico que pretendía reducir el porcentaje de recién nacidos con bajo peso con intervenciones no farmacológicas, sino mejorando el estilo de vida y los hábitos alimentarios maternos con dieta mediterránea y reduciendo el estrés mediante técnicas como el mindfulness. Fue muy bonita y enriquecedora la interacción con las pacientes, a las que seleccionábamos en la semana 20 de gestación. Trabajamos con un equipo multidisciplinar que incluía desde nutricionistas hasta psiquiatras. El estudio demostró ser muy efectivo, sobre todo la parte de la dieta mediterránea, y se publicó en una de las revistas con mayor impacto a nivel mundial, la revista JAMA.
¿Qué ha supuesto para usted tener contratos Río Hortega y Juan Rodés?
Considero muy importante que los profesionales sanitarios podamos ir a formarnos a centros nacionales e internacionales de referencia para luego importar los conocimientos o nuevas técnicas a los hospitales de nuestra comunidad. El contrato Rio Hortega me permitió realizar esta formación superespecializada en un centro de referencia a nivel mundial, y el Juan Rodés me ha facilitado poner en práctica dicha formación en el centro donde comencé mi especialización, el Hospital Clínico Lozano Blesa de Zaragoza. Es crucial que se potencien este tipo de contratos y que, posteriormente, se facilite la reincorporación del profesional al Sistema Nacional de Salud en puestos de alta especialización.
Fue la responsable de la primera publicación, a nivel internacional, de resultados sobre la repercusión de una amenaza de parto prematuro en el neurodesarrollo de un niño. ¿A qué conclusiones llegaron?
El estudio consistía en reclutar a las embarazadas cuando ingresaban por una amenaza de parto prematuro y a los dos años se les realizaba a los niños una valoración de neurodesarrollo. Los resultados fueron muy impactantes, ya que mostraron que el neurodesarrollo de los niños que habían nacido a término tras sufrir este evento durante el embarazo era más parecido al de los prematuros que a los controles. Con esta conclusión habría una nueva hipótesis a nivel mundial, postulando que no es tan importante las semanas de gestación a las que se nace como los insultos que tienen lugar durante la gestación.
¿Qué ha significado esto en su trayectoria?
Es el trabajo que, sin duda, voy a recordar siempre con más cariño. Aunque somos un grupo que ha crecido exponencialmente en los últimos años y que actualmente contamos con muchas publicaciones relevantes, ese artículo fue especial. Fue el primero de mi tesis doctoral y tuvo un gran impacto en nuestro campo por su publicación en el American Journal y el editorial que nos dedicó la revista. Eso supuso que Roberto Romero, el mayor experto en prematuridad a nivel mundial, contactara con nosotros e incluso viniera a Zaragoza a conocernos. En definitiva, nos situó en el mapa de esta especialidad a nivel mundial.
¿En qué trabaja actualmente?
Tenemos dos proyectos relacionados con la amenaza de parto prematuro. Por un lado, ‘Superkids study’ tiene como protagonistas a aquellos mismos niños, que ahora tienen entre 6 y 9 años, y les estamos haciendo una valoración integral, que comprende neurodesarrollo, desarrollo visual, composición corporal, condición física y salud cardiovascular. Por otra parte, estamos creando una nueva cohorte de embarazadas que sufren una amenaza de parto prematuro para estudiar el posible remodelado cardiaco de estos fetos dentro del útero como consecuencia de ese insulto
¿Qué resultado sueña con alcanzar en su carrera profesional?
Demostrar cómo prevenir el parto prematuro. Si logramos conocer mejor las causas y consecuencias de la prematuridad, llegará un día en que conseguiremos prevenirla. En nuestro grupo de investigación, que incluye biólogos, bioquímicos, obstetras y pediatras, continuaremos trabajando para, algún día, poder demostrarlo.