Un equipo internacional de científicos, integrado por universidades de Estados Unidos y Canadá, ha establecido por primera vez los marcadores neuronales de los pensamientos ocultos, ese flujo interminable de ideas no manifestadas que ocupa nuestra mente cuando estamos despiertos.
Ha podido determinar que el cerebro rastrea nuestros pensamientos mientras estamos en estado de atención interna y detecta si estamos concentrados o dejando transcurrir el flujo de ideas que genera la actividad neuronal.
La atención interna, que abarca el acto de soñar despierto, el pensamiento creativo y la obsesión con una idea, puede ocupar hasta el 50 por ciento de nuestros pensamientos mientras estamos despiertos, destacan los investigadores.
La investigación ha descubierto que los pensamientos internos que fluyen libremente están fuertemente vinculados con las emociones positivas y con los procesos creativos, mientras que los pensamientos ocultos que nos absorben tienden a estar asociados con emociones negativas, según los investigadores.
El estudio también arroja nueva luz sobre la tan difamada «mente errante» (que oscila entre la simple atención desenfocada hasta la ensoñación) y muestra que este estado mental tiene sus atributos positivos.
Analizando cerebros Usando el electroencefalograma (EEG) para medir la actividad cerebral mientras un grupo de personas realizaban tareas de atención corrientes, los investigadores identificaron señales cerebrales que revelan cuándo la mente está enfocada en una tarea o se encuentra vagando sin rumbo.
Es la primera vez que se obtiene evidencia neurofisiológica de cómo el cerebro distingue diferentes patrones de pensamiento interno, lo que permite comprender mejor la variedad de pensamientos que existen en el ámbito de la cognición humana, señala el autor principal del estudio, Robert Knight, en un comunicado.
Los resultados de esta investigación, publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, sugieren que desconectar nuestro entorno externo y permitir que nuestros pensamientos internos se muevan libre y espontáneamente, constituye una función necesaria del cerebro que puede promover la relajación y la creatividad, según los investigadores.
Además, los marcadores EEG que detectan cómo fluyen nuestros pensamientos internos pueden ayudar a los investigadores y médicos a detectar ciertos patrones de pensamiento relacionados con un espectro de trastornos psiquiátricos y de atención, incluso antes de que los pacientes se den cuenta de dónde divagan sus mentes.
Pensamientos y creatividad Para llegar a estas conclusiones, los investigadores trabajaron con 39 voluntarios a los que proporcionaron información básica sobre patrones de pensamiento, y a continuación les pidieron que realizaran una tarea cognitiva simple.
La tarea consistía en contemplar una pantalla de ordenador en la que aparecían una serie de flechas apuntando en distintas direcciones. Los voluntarios tenían que fijarse en qué flechas estaban orientadas en la misma dirección.
Mientras realizaban esta tarea, su actividad cerebral era registrada mediante encefalograma (EEG) a través de electrodos distribuidos estratégicamente por el cuero cabelludo.
Al final de la tarea, los investigadores preguntaron a los voluntarios qué grado de interés y concentración habían dedicado a la identificación de flechas, y luego compararon esas impresiones subjetivas con los datos EEG.
Sintonía con el cerebro Descubrieron que los relatos de las personas sobre sus procesos mentales mientras realizaban la tarea, se correspondían estrechamente con los tipos de ondas cerebrales registrados para cada uno de ellos.
También observaron que existen marcadores neuronales robustos diferentes, unos para cuando nuestra atención no está enfocada en una tarea, y otros para cuando nuestros pensamientos divagan de un tema a otro.
Se detectó asimismo un aumento de las ondas cerebrales alfa en la corteza prefrontal de dos docenas de participantes del estudio cuando sus pensamientos saltaron de un tema a otro, proporcionando una firma electrofisiológica clara para el pensamiento espontáneo y sin restricciones.
Las ondas alfa son ondas cerebrales relativamente largas, con una frecuencia de aproximadamente 9 a 14 ciclos por segundo. Investigaciones anteriores habían establecido que estas ondas están asociadas con estados relajados y meditativos. La nueva investigación fortalece el vínculo entre las ondas alfa y los estados mentales que deambulan libremente, según los investigadores.
También se observaron en los voluntarios señales cerebrales más débiles, conocidas como P3, en la parte posterior del cerebro, lo que ofrece otro marcador neuronal para cuando los sujetos no estaban prestando atención a la tarea realizada.
Conocer estos patrones de ondas cerebrales y su relación con estados mentales específicos implica por último que, teóricamente, es posible detectar qué tipo de pensamientos ocupan la mente de una persona, sin necesidad de preguntarle en qué está pensando, concluyen los investigadores.