Hace unos días el gallego Víctor Loira cubría un recorrido de más de 800 kilómetros en bicicleta entre Galicia y Guadalajara para visibilizar la situación de los pacientes ostomizados en nuestro país y reivindicar la necesidad de baños adaptados en recintos públicos. Hoy, 5 de octubre se celebra el Día Mundial del Ostomizado, un colectivo que solo en España agrupa a unas 70.000 personas.
Casi todos los pacientes ostomizados –a los que se les ha practicado una abertura natural o quirúrgicamente creada que une una parte de una cavidad corporal con el exterior- vienen derivados de una colostomía (55%) - tipo de estoma que permite unir el colon a la pared del abdomen como consecuencia de un acto quirúrgico-, frente a las ileostomías (35%) -procedimiento quirúrgico en el cual una porción del íleon se expone a través de una apertura de la pared abdominal para permitir el paso de heces- y las urostomías (10%) - una abertura en la pared abdominal hecha mediante cirugía que sirve para desviar la orina fuera de la vejiga que está enferma o que no funciona como debería-.
En Aragón más de 450 personas forman parte de la Asociación de Ostomizados de Aragón (ADO) cuya actividad gira en torno dotar de mayor visibilidad a esta problemática y dar a conocer las necesidades y aspiraciones de estas personas. En las últimas dos décadas desde que se puso en marcha la entidad, más de 3.000 pacientes han pasado por ADO, una de las pocas asociaciones españolas de ostomizados que cuentan con un servicio especializado de enfermería. “Tenemos una media de 1.000 consultas anuales de enfermería”, explica Eduardo Castán, vocal de la asociación.
Su sede se encuentra en la calle Catalina Salazar y ofrece consulta dos días a la semana por la tarde, los martes y los jueves. “Una de las peculiaridades de nuestra patología es que dependemos durante toda la vida de personal especializado y eso limita bastante la vida del paciente”, añade Castán. Sin embargo, asegura que cada vez cuentan con más medios para llevar una vida ‘normal’.