Una publicación internacional sitúa a España entre los países europeos más avanzados en Psiquiatría Psicosomática y de Enlace (UPPE) y en el desarrollo de unidades médicas especializadas en esta disciplina.
Según informa la Universidad de Zaragoza, esta conclusión, publicada en la revista 'Journal of Psychosomatic Research', se sustenta en una encuesta a nivel nacional llevada a cabo por el Grupo de Trabajo de la Sociedad Española de Psiquiatría (SEP). El trabajo publicado en la referida revista médica, una de las más influyentes en su campo a nivel internacional, está liderado por tres investigadores de la Universidad de Zaragoza y del Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón, Antonio Lobo, Ricardo Campos, Tirso Ventura y Carlos Marcos.
Con algunos antecedentes relevantes, el Hospital Clínico Universitario de Zaragoza, junto al Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid fueron los pioneros que en 1977 inauguraron las primeras UPPE modernas en nuestro país, inspiradas en el modelo americano, y los principales hospitales aragoneses disponen de muy activas UPPE.
La encuesta publicada señala que prácticamente la totalidad de 112 hospitales del Sistema Nacional de Salud (SNS) encuestados realizan actividades clínicas que corresponden a la disciplina y que 66 de ellos (el 58,9%) ya tienen una unidad específica que cumple los criterios establecidos. La encuesta ha sido realizada con una metodología original que requirió el nombramiento de personas responsables de llevarla a cabo en cada una de las comunidades autónomas del país, quienes al mismo tiempo nombraron a responsables en cada uno de los hospitales de su región.
Las Unidades de Psiquiatría Psicosomática y de Enlace diagnostican y tratan los problemas de salud mental en los pacientes hospitalizados en plantas médico-quirúrgicas de hospitales generales. Además, el 74 % de los hospitales participantes en la encuesta atiende pacientes ambulatorios y existen importantes conexiones con la atención primaria.
La disciplina se inspira, por una parte, en la filosofía del movimiento psicosomático tradicional, el que considera que cualquier enfermo, como persona, debe ser atendido de sus males corporales, pero también de su vertiente psicológica, de su estado de ánimo, sus sentimientos o su estado cognitivo. Por otra parte, se fundamenta en datos empíricos sólidos, "evidencias" para los profesionales, aunque no bien conocidos todavía.
Según los investigadores, un tercio de los pacientes médico quirúrgicos o de atención primaria tiene problemas psíquicos clínicamente significativos, que, con distintos grados de intensidad, complican el curso de la enfermedad corporal y empeoran el pronóstico. Por esta razón, los expertos consideran que estos problemas psíquicos necesitan ser diagnosticados y tratados, lo que además repercute positivamente, al menos a medio y largo plazo, en los costes del tratamiento.
La encuesta nacional ha documentado también que el 83,3% de los hospitales con estas unidades mantiene activos programas "de enlace" con servicios médico-quirúrgicos que prevén la inclusión de los profesionales de salud mental en los equipos médico-quirúrgicos. De esta forma, se favorece la coordinación y el enfoque de una medicina "integral" y la formación de todos los profesionales en los aspectos psicológicos y psiquiátricos en sus pacientes.
El estudio documenta, asimismo, que los programas "de enlace" en nuestro país abarcan un muy amplio espectro de especialidades médico-quirúrgicas, y los más habituales se sitúan en los servicios de Oncología; de cirugía bariátrica (obesidad mórbida) y Neurología.