El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha confirmado que los países tienen derecho a hacer obligatoria la vacunación de los niños frente a ciertas enfermedades, por entender que puede suponer una medida "necesaria" para proteger no solo la salud propia sino la del conjunto de la sociedad.
La corte, vinculada al Consejo de Europa, responde así a una batería de recursos llegados de República Checa, donde varios demandantes habían solicitado al TEDH que se pronunciase después de haber sido multados o de que sus hijos no hubiesen podido acceder a centros de educación infantil.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha confirmado que los países tienen derecho a hacer obligatoria la vacunación de los niños frente a ciertas enfermedades, por entender que puede suponer una medida "necesaria" para proteger no solo la salud propia sino la del conjunto de la sociedad.
La corte, vinculada al Consejo de Europa, responde así a una batería de recursos llegados de República Checa, donde varios demandantes habían solicitado al TEDH que se pronunciase después de haber sido multados o de que sus hijos no hubiesen podido acceder a centros de educación infantil.
Por 16 votos a uno, los jueces han concluido que medidas como las de República Checa, que incluye en la cartilla obligatoria de vacunación nueve enfermedades, son "necesarias en una sociedad democrática", pese a la intromisión que pueda suponer en el derecho a la vida privada de los ciudadanos.
La sentencia recoge que las medidas adoptadas por las autoridades checas son proporcionales, señalando por ejemplo que la multa dictada en uno de los casos no fue "excesiva" y que el veto de acceso en guarderías "fue más una medida preventiva que punitiva", con vistas a proteger a otros alumnos.
Asimismo, recuerda que pese a que pueda limitar inicialmente el desarrollo del niño, la prohibición se levanta en cualquier caso al llegar a la edad de educación obligatoria, donde República Checa ya no contempla distinción alguna para los niños que están vacunados y los que no.
Consideran los jueces, por tanto, que se respeta el interés superior del menor y que la medida cuenta con el respaldo de las autoridades médicas. El TEDH reconoce que varios países han revisado sus políticas ante un aparente descenso de la vacunación voluntaria, que pone en peligro en última instancia la denominada "inmunidad de rebaño".