Miedo al contagio, tristeza por no despedirse de un ser querido o no poder ver a un familiar ingresado, incertidumbre, sobrecarga de trabajo del personal sanitario y sociosanitario, intranquilidad por la escasez inicial de material de protección, trastornos de ansiedad y depresión por el creciente número de infectados y fallecidos, estrés por el confinamiento, angustia ante la crisis económica... La emergencia por la covid-19 ha provocado un drama sanitario de gran magnitud y deja tras de sí secuelas emocionales en la población y en aquellos colectivos que han luchado en primera línea. Para atender el impacto covid han surgido muchas iniciativas para ofrecer apoyo y asesoramiento, como el teléfono de atención telefónica que impulsó el Colegio Profesional de Psicología de Aragón (COPPA) y que ha recibido más de 1.400 consultas.
Ya lo advirtió la consejera de Sanidad, Sira Repollés, en su primera intervención en las Cortes de Aragón, cuando alertó de las "nuevas patologías" que aparecerán, como los síndromes de estrés postraumático, las enfermedades mentales o el impacto que el confinamiento ha tenido en la salud de los ciudadanos. Para hacer frente a este escenario, la DGA potenciará la Salud Mental en la era post-covid porque puede aumentar el riesgo de padecer "alteraciones psicológicas o psiquiátricas leves" que habrá que "abordar y afrontar", indicó.
La presidenta del COPPA, Lucía Tomás, explicó que el 23 de marzo se puso a disposición de la ciudadanía un teléfono gratuito de atención psicológica. Hasta 250 profesionales participaron en esta iniciativa solidaria, impulsada junto a Sanidad y a la Fundación Rey Ardid, que hasta el 29 de mayo recibió 1.411 consultas."El confinamiento en mayor o menor medida nos ha afectado a todos, nadie estaba preparado para una situación así. Ha habido miedo, angustia y se ha manifestado en ansiedad, depresión, malestar general y mucha preocupación económica", apuntó Lucía Tomás.
También el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) impulsó un teléfono de atención psicológica a los trabajadores sociosanitarios durante la pandemia, que atendió una treintena de consultas de personas que se sentían sobrepasadas por la situación y que expresaban su temor. Se les ofreció "apoyo emocional o se les derivó al sistema de salud si se estimó conveniente", indicaron fuentes del departamento.
Un 12% podría sufrir estrés postraumático
Desde la Sociedad Aragonesa de Psiquiatría Legal, su presidente, José Carlos Fuertes, subrayó las consecuencias que ha tenido la crisis entre el personal sanitario. Tanto es así que, atendiendo a estudios y a la evolución de otras epidemias, entre el 12% y el 14% del personal sanitario podría sufrir trastorno del estrés postraumático "por vivencias especialmente dolorosa de gran sufrimiento, por la sobrecarga de trabajo, la forma en la que han fallecido los pacientes, haber asumido el papel de ser el último cuidador, tener que informar a las familias, enfrentarse a una situación general de miedo e inseguridad. Eso genera desánimo, pesimismo, angustia o temor, que hay que tratar".
El Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza, según su presidenta, Concha Ferrer, lanzó consultas de apoyo psicológico ante las "situaciones duras y muy complicadas" que se han vivido. "Se observa una sensación de tristeza", dijo. El Colegio de Enfermería de Zaragoza también impulsó sesiones de apoyo psicológico, con el apoyo de COPPA, a las que se apuntaron casi 20 profesionales, la mayoría de unidades de ucicovid.