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21 enero, 2025La investigadora del IIS Aragón habla en esta entrevista sobre su labor dirigiendo el grupo emergente ‘Cancer Heterogeneity and Immunomics’ (GIIS110) y cuáles son sus líneas de investigación
Rebeca Sanz Pamplona, Doctora en Bioquímica y Biología Molecular y actual investigadora principal del grupo ‘Cancer Heterogeneity and Immunomics’ (GIIS110), empezó en el mundo de la investigación por curiosidad. Desde pequeña, siempre le ha gustado entender los procesos naturales y hacer experimentos. Ahora, licenciada en Biología con doctorado en Bioquímica y Biología Molecular, Máster en Biotecnología, Máster en Bioinformática y Posgrado en Bioestadística; lleva 20 años investigando.
Rebeca Sanz se centró en la investigación sobre el cáncer para poder entender mejor la biología molecular y celular subyacente en la enfermedad: «En concreto, utilizo herramientas bioinformáticas y de biología de sistemas porque me permite analizar muchas variables y muchos pacientes a la vez, estudiando a la célula tumoral como un “todo”. Permite reutilizar datos resultantes de algunos experimentos para analizar otras variables, o desde otra perspectiva, y esto hace que estemos en contacto con científicos y científicas de todo el mundo”.
Rebeca Sanz investiga en el IIS Aragón desde 2022 gracias a una ayuda competitiva de la fundación ARAID (Gobierno de Aragón), para contratar personal investigador. La investigadora reflexiona sobre su llegada a la fundación: “Gracias a la ayuda de otros investigadores del centro que me animaron a presentarme a dicha convocatoria y también a establecerme aquí. De hecho, mantenemos colaboraciones muy fructíferas”.
¿Qué líneas de investigación se trabajan en su grupo?
El interés del grupo está centrado en comprender, a un nivel molecular y celular, la progresión del cáncer desde su inicio hasta la diseminación metastásica, siempre teniendo en cuenta tanto la heterogeneidad tumoral como la interacción entre las células malignas y el microentorno donde crecen. Y de esta manera, buscar biomarcadores útiles para estratificar pacientes y poder tratarlos de manera más personalizada. Para ello, utiliza sobre todo técnicas de inmunogenómica, definida como la aplicación de herramientas informáticas al estudio de la interacción entre el microambiente tumoral y la célula maligna.
El grupo es experto en análisis ómicos, y se está especializando en técnicas como la transcriptómica espacial y secuenciación de célula única. Tenemos dos líneas principales. En la primera, estudiamos las metástasis, que son responsables de la mayoría de las muertes debidas a cáncer. Concretamente, estudiamos la influencia del sistema inmune en el desarrollo de las distintas metástasis, y las similitudes en el microambiente de las metástasis que crecen en el mismo órgano, pero tienen un origen diferente. Por ejemplo, un resultado interesante derivado de esta línea indica que las células NKs residentes en los pulmones podrían ser protectoras frente a la invasión de células cancerígenas. Y además, que podrían utilizarse como tratamiento.
Recientemente se ha abierto una nueva línea de investigación, centrada en el análisis de los neoantígenos tumorales como potenciales biomarcadores y estrategias terapéuticas en tumores sólidos pediátricos, financiada por la Asociación de Padres de Niños con Cáncer de Aragón (ASPANOA). Los neoantígenos se definen como antígenos que se expresan en la célula tumoral y son capaces de activar una respuesta inmune en el paciente. Se generan a partir del producto de degradación de proteínas tumorales. Dichas proteínas contienen secuencias peptídicas diferentes a las de las proteínas no tumorales. Esto hace, que al ser presentadas en superficie vía HLA, el sistema inmune las reconozca como un elemento extraño y reaccione atacando a la célula tumoral con linfocitos T. Su mayor interés radica en que pueden ser utilizados como terapia contra el cáncer, por ejemplo, para sintetizar vacunas. Ya hemos identificado una serie de neoantígenos en una serie de pacientes utilizando nuestra metodología. Además, al buscar correlaciones con datos clínicos, comprobamos que había una diferencia significativa entre el número de neoantígenos en pacientes que sobrevivían o que no. Esto parece indicar que los neoantígenos tienen un papel relevante en este tipo de tumor.
¿Cuál es el principal desafío al que se enfrenta actualmente su grupo de investigación?
Al ser un grupo emergente, tenemos varios desafíos. Por un lado, económico; ya que es necesario conseguir financiación tanto para consolidar personal como para seguir avanzando con las diferentes líneas de investigación. Por otro lado, al ser un grupo que maneja grandes volúmenes de datos ómicos, necesitamos una infraestructura informática cada vez más elevada. Por último, me gustaría poner el foco en un problema del que se habla poco pero que creo afecta a todos los grupos de investigación, y que es el gran volumen de tiempo dedicado a burocracia.
¿Algún proyecto en marcha que quiera destacar?
El proyecto financiado por ASPANOA, que está centrado en tumores sólidos pediátricos. Aunque es muy prematuro hablar de una posible traslación a la clínica, los resultados preliminares son prometedores (de hecho, hemos recibido un premio en un congreso al presentarlos). Es un honor para nosotros que una asociación como ASPANOA haya apostado por nosotros, y sería muy gratificante poder aportar nuestro granito de arena a la lucha contra el cáncer, especialmente por aumentar la calidad y la esperanza de vida de esos niños y sus familias.
¿Qué perfiles forman tu equipo de investigación?
Una de las principales características del grupo es que es altamente multidisciplinar. Incluye perfiles experimentales y computacionales, lo que nos permite abarcar los proyectos de forma integral, desde analizar muestras humanas y hacer experimentos en modelos preclínicos, hasta realizar análisis complejos con los datos generados, y validar nuestros resultados con datos públicos. También abarcamos un rango en titulaciones, desde biología, biotecnología, veterinaria, farmacia, ingeniería biomédica…
¿Por qué las empresas tendrían que apostar por la investigación, y en concreto, por vuestro grupo?
Bueno, creo que no soy la persona más adecuada para responder a esa pregunta ya que desconozco el mundo empresarial. Evidentemente, creo que no solo las empresas sino también los organismos públicos y la sociedad en general debería apostar por la ciencia y la investigación no solo como elemento generador de riqueza (que también) sino como generador de conocimiento (para mí, más importante). En concreto, nuestro grupo intenta encontrar biomarcadores útiles para manejar los pacientes de forma más personalizada; y también nuevas dianas terapéuticas. En caso de éxito, pienso que sería muy beneficioso para las empresas comercializar el producto que midiera dicho biomarcador. De hecho, hay muchos ejemplos actuales en el campo de la oncología molecular.
¿Consejos para alguien que esté empezando en el ámbito de la investigación sanitaria?
No soy mucho de dar consejos, pero creo que es importante hacer las cosas bien, ser honesto con tus propios resultados y sobre todo escoger un tema de investigación que realmente te motive. Y también, dedicar parte de tu tiempo libre a familia, amigos y otras aficiones.