El estudio ha ganado el primer Premio de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) 2021 a la Mejor Comunicación Formato Póster presentada por higienistas en la última edición del Congreso de la SEPA, celebrado en Sevilla del 25 al 27 de noviembre.
Rosa Tarragó Gil, higienista bucodental e investigadora principal de este ensayo, considera que la boca representa un potencial foco de infección del SARS-CoV2, por ser una puerta de entrada y de salida del virus, y por ello cree que el uso de CPC en colutorios "podría ser útil para reducir la carga viral, y esto podría impactar en la reducción de la patogenicidad y transmisión de la COVID-19".
Se ha demostrado que con estos enjuagues bucales con CPC se rompe el virus y, por tanto, se reduce la carga viral y, también, la transmisibilidad del virus SARS-CoV-2 en la boca del paciente positivo, por lo que se ha demostrado como una medida preventiva más para combatir la pandemia, junto con la mascarilla y el distanciamiento social.
El estudio se ha realizado con pacientes del Sector sanitario Zaragoza II de entre 18 y 80 años covid-19 positivo con sintomatología con el único requisito de que no se hubieran enjuagado un mes antes con colutorios con CPC.
Los investigadores recogían en el propio centro de salud una muestra de saliva a los pacientes covid-19 positivo tras haberles realizado la prueba que confirmaba su positividad, tras lo que debían enjuagarse con colutorio con CPC o con un placebo, aleatoriamente asignado, durante 1 minuto.
Después, tenían que pasar 2 horas, en las que el paciente no podía ni comer ni beber, para luego recogerse otra muestra de saliva, esta vez ya aislados en su domicilio.
Las muestras, que fueron examinadas con la colaboración del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza, reflejaron que se reducía de forma estadísticamente significativa la capacidad de infección y la carga viral de ésta.