El 12 de septiembre es el Día Internacional de Acción contra la Migraña, una fecha que se celebra cada año con el objetivo de visibilizar y concienciar a la sociedad sobre una enfermedad que, según AEMICE (Asociación Española de Migraña y Cefalea) afecta en España a cinco millones de personas, sobre todo mujeres de entre 20 y 50 años.
Para hablar de esta enfermedad infradiagnosticada y poco reconocida, charlamos con Dra. Sonia Santos, Neuróloga y Coordinadora del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología.
La OMS califica a la migraña como una de las dolencias más incapacitantes en el mundo. ¿Por qué lo es tanto?
Hay un estudio de carácter epidemiológico, que es Global Burden of Disease, que marca la discapacidad asociada a distintas enfermedades. La última publicación es del 2016 y ahí nos dice que la migraña es el sexto trastorno más prevalente y el segundo más discapacitante a nivel mundial y el primero por debajo de los 50 años, porque se mide en años vividos con discapacidad. Esto es así porque, además de que produce mucho dolor que interfiere en la actividad de los pacientes, provoca una serie de síntomas, como la dificultad para pensar, para concentrarte y predomina entre los 20 y los 50 años, que es justo la etapa en las que más activos somo en la vida laboral. La migraña causa mucho absentismo, y también presentismo, es decir, que, aunque el paciente vaya a trabajar, está rindiendo muy por debajo de lo habitual.
La gente asocia la migraña al dolor de cabeza fuerte, pero muchos de los que la padecen puede sufrir también vómitos, alteraciones visuales y del habla, hormigueos…
Sí, y ese es precisamente uno de los mitos que hay que romper, porque la migraña no es solo dolor. Hay muchos síntomas asociados al dolor que incluso aparecen 48 horas antes del ataque de dolor y que luego conviven con él, como que te moleste mucho la luz, los ruidos, dificultad para concentrarte…
La migraña se manifiesta en un momento determinado y acompaña al paciente para siempre. ¿A partir de qué edad podemos decir que ya no vamos a padecerla?
En las mujeres suele aparecer con las primeras menstruaciones (entre los 10 y los 14 años) y el periodo de máxima discapacidad es de los 20 a los 45. A partir de esa edad es muy raro que un paciente debute con una crisis de migraña. Se puede dar algún caso que se manifiesta por primera vez con a menopausia, pero es muy raro.
¿Cómo se suele diagnosticar? Porque no aparece en pruebas por imagen ni analíticas…
Sí, eso es. La migraña es una cefalea primaria, es decir, que no está asociada a ninguna enfermedad, con lo cual el diagnóstico no requiere de la realización de neuroimagen, que solo planteamos en casos muy específicos. Los criterios diagnósticos son exclusivamente clínicos, y los pacientes para ser diagnosticados con migraña tienen que cumplir unas características: padecer al menos cinco episodios de dolor de cabeza pulsátil, incapacitante, con otros síntomas como nauseas o vómitos…
"Hay que acabar con mitos como que el chocolate desencadena una migraña. Para que se produzca un ataque tienen que darse muchos factores"
Se sabe que la migraña afecta más a mujeres que a hombres, que tiene factores genéticos, que hay circunstancias que la pueden desencadenar… pero en realidad, se desconoce el origen a ciencia cierta…
No se conocen las causas, pero algo que dejar claro es que la migraña sí es una enfermedad, porque se ha llegado a decir que es una condición de la persona o cosas así. Lo que sí se sabe es que el cerebro nace, es decir, que la personas que padece migrañas ya nace con la predisposición a padecerlas. Al cerebro migrañoso lo que le ocurre es que reacciona de manera patológica a determinados estímulos, como determinados ruidos, una luz muy potente… Al paciente que no es migrañoso le pueden molestar, pero al rato se adapta y ya no lo percibe como molesto. En cambio, al paciente que tiene un cerebro migrañoso, le molesta, no es capaz de adaptarse y ese estímulo puede desencadenar una crisis de migraña. Además, hay muchos factores que pueden influir, como un componente genético, pues hay mucha más prevalencia de migraña en hijos con pacientes con migraña.
Una persona con antecedentes familiares de migraña, ¿puede librarse de ella?
No, porque es algo con lo que se nace, y se puede nacer o no nacer con ella. Si tienes familiares es más probable. si naces con ella, lo que puedes hacer son cosas para tener una mejor calidad de vida. Y otro mito que hay que romper es el de los desencadenantes, como que determinados alimentos provocan crisis de migraña, como el chocolate, porque realidad no es así. Las crisis son fruto de muchas circunstancias, y no siempre la desencadenan las mismas. Se sabe que el estrés, la menstruación, los cambios de tiempo… incluyen, pero no quiere decir que las desencadenen siempre. Por eso, lo que no recomendamos a los pacientes que hagan conductas evitatitas. Es decir, que si un día comieron chocolate y justo ese día tuvieron una migraña, no les recomendamos que dejen de comer chocolate para siempre, porque si no dejarían de hacer muchas cosas en su vida. Lo que se ha visto es que hay una suma de factores desencadenantes para que ese día tengas la migraña, no depende solo de que te comas un trozo de chocolate.
Cada vez hay más tratamiento que ayudan a mitigarlas, desde los antinflamatorios más comunes hasta betabloqueantes, neuromoduladores… e incluso tratamientos con toxina botulínica A. ¿Son todos eficaces?
El tratamiento se basa en unos cuantos factores. El primero es educar al paciente en su enfermedad, porque por muchos medicamentos que tomen, si no son disciplinados con el horario de comidas, una buena calidad de sueño, el control del estrés… no sirve para nada. Tratamientos farmacológicos hay muchos, pero el problema que teníamos hasta ahora es que no estaba diseñados específicamente para tratar la migraña, como antinflamatorios, antidepresivos… que en general van bien, pero tienen efectos secundarios. La tóxica botulínica, por ejemplo, se recomienda en el caso de migraña crónica y actúa al nivel de una proteína específica que sabemos que se eleva durante las crisis de migraña.
¿Y los anticuerpos monoclonales en qué consisten?
Se trata de una auténtica revolución en los tratamientos contra la migraña que hemos tenido durante el último año, porque son eficaces, seguros y se toleran muy bien. Se trata de un medicamento preventivo que, por primera vez, se ha diseñado específicamente para la migraña. Actúan en una molécula muy concreta, la CGRP, una proteína que los pacientes tienen elevada, que aumenta durante las crisis de migraña y que se sabe que cuando disminuye, los pacientes mejoran.
¿Es accesible, en qué casos se recomienda?
El Ministerio lo ha aprobado con unas indicaciones muy concretas: pacientes con más de ocho crisis de migraña al mes y en los que hayan fracasado al menos tres tratamientos preventivos, uno de ellos toxina botulínica si el paciente tiene una migraña crónica. Los profesionales estamos de acuerdo con este criterio, porque creemos que hay que pasar por una serie de tratamientos primero. Son de dispensación hospitalaria, no se pueden adquirir en las farmacias y es una inyección mensual. Sustituimos la toma de pastillas diaria por una inyección subcutánea, y el cambio ha sido muy drástico.