La obesidad infantil en España ha aumentado en los últimos años hasta alcanzar cifras "muy semejantes" -por encima del 25%- a las que manejan los investigadores en Estados Unidos. Detrás se encuentran todo tipo de factores, buena parte de ellos vinculados al estilo de vida, como la nutrición, la alimentación y el ejercicio físico. "Si no empezamos con estilos de vida sanos desde las primeras edades podemos comprometer que las próximas generaciones vivan tanto como nuestros mayores y que lo hagan con una calidad de vida peor. Hay estudios en EE. UU. que apuntan ya en esa dirección, y creo que no debemos echar por tierra los logros que hemos conseguido en esta línea", advierte el catedrático de la Universidad de Zaragoza Luis Alberto Moreno, todo un referente en el estudio de la nutrición y la obesidad infantil.
Amparado por el Centro de Investigación Biomédica en Red de Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBEROBN), el grupo de investigación GENUD (Growth, Exercise, Nutrition and Development) realiza en Zaragoza y provincia dos programas con niños de entre 3 y 6 años para determinar cuáles son los factores de riesgo asociados a esta enfermedad.
"Estamos invitando a sumarse a las familias porque la participación no es tan alta como nos gustaría, y seguiremos trabajando hasta que consigamos 600 niños en la ciudad", explica este experto en Nutrición y Obesidad Infantil.
Las cifras que barajan hasta la fecha les llevan a ser optimistas si se toman las medidas oportunas en este campo. Es cierto -reconoce este investigador- que el porcentaje de obesidad infantil ha aumentado, "y mucho", en los últimos años. "Tuvo un pico importante en la década de los 80 y los 90, pero ahora parece que estamos estabilizados e incluso empieza a disminuir un poco", matizan. Aun con todo, no hay que bajar la guardia.