Un niño de 4 años maliense que sufre una deformidad en la cara causada por un tumor craneal va a ser sometido a un tratamiento en el Hospital Infantil de Zaragoza. El pequeño ha llegado a la capital aragonesa después de que un equipo médico de militares españoles pertenecientes a la misión europea EUTM-Mali lo trataran en el país africano y el Ministerio de Defensa decidiera su traslado a España hace dos semanas.
El niño fue trasladado en un avión militar desde Bamako hasta Zaragoza acompañado de su padre, aunque no se hizo público. El tratamiento del pequeño se realizará también bajo el amparo del Hospital Militar, que lo acogió los primeros días, y Cáritas Castrense, que ha facilitado la ayuda humanitaria con una familia de apoyo en Zaragoza para ellos.
La enfermedad rara que sufre el niño maliense se conoce como neurofibromatosis, que causa un grupo de trastornos genéticos que hacen que se formen tumores. El pequeño está siendo asistido en el departamento de Oncología del Hospital Infantil.
Entre los especialistas del Hospital Infantil que lo atendieron hubo varios neurocirujanos, cirujano maxilofaciales, neuropediatras, oftalmólogos, pediatras y radiólogos. Fuentes de la DGA señalaron que el análisis le llevó un tratamiento farmacólogo por la vía oral y el control del oncólogo pediatra. Además, tendrá que pasar un control cada dos semanas para su revisión.
Visita de la ministra a Zaragoza
Está previsto que este pequeño acogido por las tropas españolas en Mali sea visitado el próximo miércoles por la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien conocerá de primera mano la historia de la evolución del niño.
En la entrevista concedida a HERALDO hace unos días, la ministra reconoció que con la suspensión de la misión en Mali por la Unión Europea, se va a redimensionar al retirar sus tropas Francia y otros países, y la participación de España “será más reducida y diferente”.
Asimismo, Margarita Robles acudirá también al Hospital Militar para conocer el estado de los 14 heridos de la guerra de Ucrania que están siendo atendidos en el centro zaragozano. Dos de los tres primeros que llegaron el pasado 5 de mayo sufren amputaciones de sus brazos tras ser víctimas de explosiones y ya se preparan las prótesis.
Respecto a las once víctimas que llegaron el pasado 19 de mayo en el segundo traslado en un avión militar desde Polonia hasta la Base de Zaragoza, les han realizado numerosas pruebas de escáner y radiología para detectar los daños maxilofaciales que sufren, así como restos de metralla tanto en la cara como en las piernas.
Está previsto que una vez que finalicen los estudios previos que se les está realizando en el Hospital Militar comiencen las intervenciones quirúrgicas y los tratamientos posteriores