El IIS Aragón colabora desde 2019 en el estudio ‘Meli-POP para prevenir la obesidad infantil. Se trabaja con niños que tenían entonces entre 3 y 6 años y a los que se hará un seguimiento hasta la adolescencia
Se estima que cuatro de cada diez escolares presentan sobrepeso u obesidad, unas cifras que preocupan hasta tal punto que el Consejo de Ministros ha aprobado la creación de un comité que se encargará de impulsar y coordinar el desarrollo de un plan para mejorar la salud de los menores. Y es también el objetivo que persigue el estudio ‘Meli-POP’ (Mediterranean Lifestyle in Pediatric Obesity Prevention), en el que colabora el Instituto de Investigación Sanitaria IIS Aragón desde 2019.
Son muchos los expertos que califican la obesidad infantil como «la otra pandemia». Luis Alberto Moreno Aznar, catedrático de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza y coordinador del grupo Genud (Growth, Exercise, Nutrition and Development), reconoce que en los años 80 ya elaboraron estudios sobre este problema, «cuando la frecuencia era mucho menor que ahora». Pero ha ido a más: «Se observa que desde 2010 se ha estabilizado» pero, según añade, la crisis por el coronavirus «no ha ayudado».
«Ahora vamos a intentar que en el futuro vaya disminuyendo, porque sería lo ideal. Es uno de los problemas de salud pública más graves de este siglo».
Luis Alberto Moreno Aznar, catedrático de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza y coordinador del grupo Genud (Growth, Exercise, Nutrition and Development).
El objetivo del proyecto de investigación es «disminuir la frecuencia de la obesidad en niños que inicialmente tenían entre 3 y 6 años«. Un centenar de familias zaragozanas, en las que al menos uno de los progenitores presenta sobrepeso u obesidad, participan en este estudio, que nació, indica, para «prevenir la obesidad infantil, mediante estilos de vida que incluyen la alimentación mediterránea tradicional y el ejercicio físico».
«Para motivar a las familias, les aportamos, gratuitamente, aceite de oliva virgen extra y pescado. Antes de la pandemia, además, se ofrecían de dos sesiones de actividad física-lúdica a la semana. Durante la covid se impartían ‘online’ y ahora se fomenta que los niños realicen actividad física al menos dos veces por semana. La intervención especial se realiza sobre la mitad de los participantes», explica.
En este proyecto, que implica un «acompañamiento» durante diez años, participan otras dos ciudades españolas: Santiago de Compostela y Córdoba. La idea es que cuando llegue a su fin los niños tengan entre 13 y 16 años. «Ahora estamos acabando el seguimiento de los menores al cabo de cinco años», concreta. Los primeros resultados se podrían conocer en diciembre.
Dieta mediterránea
Desde el IIS Aragón, Moreno insiste en la importancia de la dieta mediterránea para combatir la obesidad infantil. En este sentido, según destaca, queda «un largo camino por recorrer», ya que, en estos momentos, la mitad de los niños españoles no consumen una dieta que se pueda considerar mediterránea.
«Fruta, verdura, legumbres, cereales poco refinados, aceite de oliva, por supuesto, algo de lácteos, a ser posible fermentados, más pescado y carne en cantidades moderadas».
Luis Alberto Moreno Aznar, catedrático de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Zaragoza y coordinador del grupo Genud (Growth, Exercise, Nutrition and Development).
«Si pensamos en los años 60, que es cuando en España se consumía la dieta mediterránea, no se comía tanta carne como ahora», aclara. Para el especialista en nutrición, las familias con menor nivel socioeconómico tienen más riesgo de que sus hijos sean obesos, «porque presentan un mayor consumo de este tipo de alimentos con una elevada densidad energética y menos oportunidades para realizar alguna actividad”.
Fuente: Heraldo de Aragón
Imagen: Grupo Genud – Imagen de archivo del estudio ‘Meli-POP, en el que colaboran investigadores del IIS Aragón