La pandemia de la covid-19 vive una segunda ola en todo el mundo. España está viviendo esta circunstancia con números muy preocupantes, hasta tal punto que los contagios superaron este miércoles 15 de octubre los 900.000 casos, 100.000 en los últimos 10 días, y los fallecidos ya superan los 33.413.
El problema llega cuando las personas positivas infectan a la población de riesgo (personas mayores, afectados por patologías previas de carácter severo) si no guardan de manera estricta el aislamiento de dos semanas posterior a la detección, así como las normas básicas de higiene y distancia social. Por ello, toda la población debe tener en cuenta todos y cada uno de los síntomas del virus, ya sean leves, graves, más frecuentes o menos comunes.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 80% de las personas se recuperan de la enfermedad sin necesidad de tratamiento hospitalario. Una de cada cinco personas que contraen el virus acaba presentando un cuadro grave y experimenta dificultades para respirar. Las personas mayores y las que padecen afecciones médicas previas como hipertensión arterial, problemas cardiacos o pulmonares, diabetes o cáncer tienen más probabilidades de presentar cuadros graves. Sin embargo, cualquier persona puede contraer la enfermedad y caer gravemente enferma.
Síntomas del coronavirus
Los síntomas más comunes de la covid-19 son la fiebre, la tos seca y el cansancio. Además, los dolores musculares generalizados y el cansancio extremo fueron los primeros síntomas identificados al inicio de la pandemia.
Otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la conjuntivitis, la congestión nasal, escalofríos, dolor de cabeza, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. Estos síntomas suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas levísimos.