El hospital Comarcal de Alcañiz es pionero en Aragón en la utilización de técnicas de micropigmentación para completar el proceso de reconstrucción mamaria en pacientes operadas tras haber sufrido un proceso oncológico. Se trata del único centro sanitario público de la Comunidad Autónoma que devuelve a la mama un aspecto muy parecido al real al conseguir realzar el pezón y la areola mediante sombras y puntos de luz.
El tratamiento mediante micropigmentación de la piel es muy importante porque al trastorno que supone padecer este tipo de cáncer se le une la secuela física que en muchos casos acompaña a esta patología: la extirpación del pecho.
Además, tal y como destacan los impulsores de la implantación de esta técnica en el centro hospitalario bajoaragonés, el jefe del Servicio de Cirugía del hospital de Alcañiz, Fernando Martínez, y la enfermera de la Unidad, Silvia Blasco, este proceso va más allá de la cuestión estética. Supone, de hecho, poner el broche final al cáncer y mejorar psicológicamente.
"Nos encargamos del tratamiento oncológico, de curar la enfermedad, pero también de que su repercusión psíquica sea menor, devolviendo a la mama un aspecto muy aceptable estéticamente", señala Martínez. "Conseguimos –prosigue– que esa mujer que se ha llevado un gran disgusto por padecer cáncer no sufra también las secuelas psíquicas por haberle sido operada la mama".
El del hospital de Alcañiz es un programa pionero muy importante para la recuperación física y psicológica de las pacientes, pero que también pone de relevancia que en el medio rural aragonés, con muchas dificultades para atraer médicos especialistas, también se innova en medicina.